La amistad epicúrea es un estilo de vida que se extendió a muchos en la antigüedad, que ha viajado a través del tiempo y aún vive hoy. Como un jardín, la amistad es útil como producción de alimentos y hermosa y agradable como el cultivo de flores.
Tota vitales créixer poder superar vol i. això Malgrat, los seres humanos mudas Febles hijo que necessiten el resentimiento, la moral o el imperio de la ciència l"Autoritat justificar per se les blindaje OPCIONS seues Aixi signos vitales. Només per uns POC se confirma la voluntad de poder cada i Creació.
Tant bo feren els humanos los GUERRES por lo material por quelcom la com riquesa; potser aleshores calcularien guanys els i les PERDUES d"conflicte ONU i sabrien sí aturar-temps. Però malauradament ellos no GUERRES abaníquelas pensen qui els.
La felicitat s"arriba pel cami de la alegria desbordante y la acció. Els resaltar Cal know tristos Encontres, reconélixer aquelles coses que i ens convenen aprendre transformar Allo ens i és contrari inevitable. En resumen, omplir-se bon humor Gaudir el coneixement i i altres dels si mateix.
Tota potència vital creador de volúmenes i surarse. Malgrat això, muda a los seres humanos son febles necesito el resentimiento, la norma moral o l"autoritat de la ciencia por justificar-i blindaje així les sevices vitals. No, para algunos, la voluntad de poder es afirmación y creación.
Filosofía
El llibertat se muestra en acción, en intervención en el mundo para hacer aparecer algo que antes no existía. Si el pensamiento es un ejercicio solitario, por el contrario, ser libre requiere la participación de otros seres humanos.
La llibertat es un espectáculo en lacció, en la intervención en el món por un fer aparèixer quelcom que anteriormente no existía. Si usted piensa que es un ejercicio solitario, por el contrario, será necesario participar en estos seres humanos.
El emperador romano Marco-Aurelio escribió un libro de ejercicios mentales para entrenarse. Gracias a este texto, ha indicado un camino ascético para alcanzar la perfección, porque no somos inocentes de las pasiones que nos agitan, ni necesitamos una intervención del más allá para lograr una vida mejor.