Eric Hazan: Todos sus libros


  • Paris En Tension: Urbanismo E Insurrecion En La Ciudad De La Luz

    Paris En Tension: Urbanismo E Insurrecion En La Ciudad De La Luz

    La defensa de París de 1814 a los disturbios que estallaron recientemente en los suburbios de París, a los días del mes de junio 1848 y la Comuna de 1871, el París de la desigual Baudelaire, para los días oscuros de la ocupación nazi o "renovaciones discutibles y recientes " de la ciudad. Una reflexión lúcida y esencial en la estructura urbana de París, que analiza sus sucesivas transformaciones en relación con un aspecto particular: su potencial subversivo y las diversas estrategias que han tratado de aplacar a él a través de la reconfiguración de la propia villa. Gracias a un profundo conocimiento de los diversos distritos de París, así como la historia política, social y artístico de cada uno de estos lugares, Eric Hazan nos ofrece un ensayo que es también una especie de guía de viaje con el que avanzar, calle por calle, por un Paris cuya fuerza insurgente se transforma sin pausa de la siguiente manera, al mismo tiempo, intacto.

  • Viaje A La Palestina Ocupada

    Viaje A La Palestina Ocupada

    Entre mayo y junio de 2006, un período que, no sin cierta subestimación, se podría considerar "calma" en Cisjordania, Eric Hazan decidió ir a los territorios palestinos de ver y entender el funcionamiento diario de la gran máquina burocrático-militar en abstracto llamada ocupación. No hay que olvidar que, después de más de cuatro décadas de conflicto, la información que llega a Occidente acerca de la verdadera vida cotidiana y política del pueblo palestino sigue siendo baja y excepcional, siempre comandado por los grandes medios de comunicación "Eventos". A través de las notas de viaje, las descripciones de escenas de la calle, entrevistas con los agricultores, activistas, voluntarios, médicos o políticos, este libro sería restaurar la realidad de la vida cotidiana que se vive en las ciudades palestinas: Nablus objeto de acoso diario de jeeps y tanques; en Qalqyrya literalmente aislado por la pared, ya que todos sus habitantes; en Hebrón, una ciudad palestina dominada por 400 colonos israelíes instalados en el mismo centro geográfico. Un revelador viaje a Hazan y su lector, que se da cuenta de que todo el brillo y el vértigo de nuestras pantallas domésticas no puede hacer esto.

  • Lqr. La Propaganda De Cada Dia

    Lqr. La Propaganda De Cada Dia

    Palabras, expresiones repetidas día tras día por nuestros políticos, nuestros "creadores de opinión", ocultan un sentido ideológico, una voluntad social que rara vez se confiesa. Eric Hazan desvía aquí ese lenguaje oculto y cotidiano. Cada día acechan cientos de mensajes en un nuevo idioma. Nadie habla con ella en la calle o la usa cuando habla con amigos. Y sin embargo, se las arregló para colarse en las señales del metro, señalar la radio, mostrar en los periódicos. Eric Hazan ha sido bautizado por LQR, Lingua Quintae Respublicae, por su adaptación en la Quinta República Francesa de nuestros días, pero el LQR trasciende de lejos esas fronteras: es el idioma preferido por los políticos, economistas y publicistas occidentales; El lenguaje del Nuevo Orden; El lenguaje que emana de Bruselas y de los "think-laboratories" liberales. Con ello han venido los "excluidos" por la "modernidad", las rimas de "islamismo" y "terrorismo", la "gobernanza" de la "globalización", la "sociedad civil" con su "diversidad" y "valores democráticos" El "ciudadano", aunque sea de "orígenes modestos" ... LQR puede ser el vehículo de la propaganda actual, pero a diferencia de otros anuncios del pasado, nadie lo controla de las agencias de seguridad, Evoluciona bajo una especie de darwinismo semántico. Se pretende dar una capa de respetabilidad al racismo ordinario, para asegurar la apatía, para predicar el multi-todo lo que desea-siempre y cuando el orden liberal no está amenazado. Es un arma postmoderna, muy bien adaptada a estas condiciones "democráticas" en las que ya no se trata de ganar la guerra civil, sino de sofocar el conflicto, de hacerlo invisible e inaudible. Y como un prestidigitador que terminó su número desapareciendo bajo su propio sombrero, el LQR logra propagarse sin que nadie, o prácticamente nadie, pareciera notar sus avances - sin siquiera hablar de denunciarlos. Lo que sigue aquí es un intento de identificar y descifrar esta nueva versión de la banalidad del mal.