Fernando Penco Valenzuela: Todos sus libros


  • La Foto De Capa

    La Foto De Capa

    El 9 de mayo de 2009, el historiador y escritor Fernando Penco Valenzuela y fotógrafo Juan Obrero Larrea descubrieron el lugar exacto en el que Robert Capa hizo Muerte de un miliciano, el más conocido de la historia de la imagen fotoperiodismo y uno de los iconos de la guerra civil española. Todo lo que tenía que pasar a principios de septiembre de 1936, cuando Capa disparó a su Leica en una colina en las afueras de Espejo (Córdoba) y el milagro ocurrió. Con los nuevos desarrollos, la investigación dio un vuelco extraordinario y defendida por Richard Whelan, biógrafo de Capa el más importante, la hipótesis comenzó a caer como cartas de tarjetas. Paralelamente, desde el 9 de mayo que una serie de eventos y los diversos estudios que apuntan a que el espejo se verán inmersos en el torbellino va a suceder. En ese momento, nadie quería reconocer el estudio que el autor de este libro llevado a cabo con la ayuda fotógrafo que lo acompañó a la colina donde se llevó a cabo la famosa foto; sin embargo, un año después, en mayo de 2010, El Periódico de Cataluña, en palabras del portavoz de Robert Capa y periodista en nuestro país, lo reconoció como el primero de todos. Capa de fotos cuenta la trastienda de la investigación que desde el lugar privilegiado que ocupa su empleado, otro actor en toda esta historia.

  • Guadalquivir, Un Valle Legendario

    Guadalquivir, Un Valle Legendario

    Amado y venerado la mayoría de las épocas y otros no tanto, este río, que todavía registra inundaciones turbulentas, ha forjado leyendas e historias que sedujeron a los griegos de Samos y los comerciantes de Tiro. Conocido entre los musulmanes de Al Ándalus como un gran río, el Guadalquivir todavía fascina y cautiva a los que acuden a él. Hacia el año 3300 aC, las aguas del mar penetraban hasta el estrecho de Coria y, cerca de Lebrija, pequeñas comunidades de la finca neolítica cultivaban sus campos y se alimentaban de moluscos y almejas que recogían en las costas cercanas. Poco a poco, las aguas de aquel gran golfo comenzaron a ser menos profundas y, frente al Estrecho de Coria, se formó un gran delta que se originó por el empuje de los aluviones del Guadalquivir; Eso debe haber ocurrido en los siglos IX a VII antes de Cristo, cuando el Aljarafe de Sevilla, cuyas costas cayeron abruptamente sobre el océano, comenzó a ser relevante: Fueron los tiempos de Tartessos. Esta vasta llanura pantanosa estaba ganando terreno para el delta y dio lugar a un lago de proporciones excesivas que fue inundado por las aguas ascendentes de la marea alta: la que Poseidonios vio cuando se elevó el Baetis desde el Herakleion de Gadeira hacia el año 100 a.C. Y a quien Rufus Festus Avieno llamó Lacus Ligustinus. Entonces el lago se transformó en un pantano formidable donde los jaguarzos y los bayuncos crecieron: era los días de Al-Nasir Lidin Allah, los días en que el valle fértil fue regado por las aguas de al-Wadi Kebir. El río Guadalquivir fluye por una extensión de unos 560 kilómetros y riega los campos de cultivo más fértiles y ricos del sur de Europa. Con una cuenca profusa alrededor de los 57.527 kilómetros cuadrados, nace en las sierras bética y se desarrolla hacia el suroeste jalonado por el borde meridional de la meseta. Entre Córdoba y Sevilla, sus aguas discurren por una suave pendiente formando las llanuras aluviales en las que crecen vastos campos de siembra. Más allá, el valle se convierte en un espléndido pantano donde tal vez la reserva más importante