Antes del período de adquisición del lenguaje, es decir, entre los 9 y los 30 meses, el bebé puede aprender fácilmente para indicar objetos, eventos y gestos de necesidades, fomentando la comunicación con sus padres hasta que desarrollen plenamente la capacidad de hablar. Un beneficio adicional es que la inclusión de estos gestos, que los autores llaman signos del bebé, acelera el proceso de aprendizaje del habla, estimula el desarrollo intelectual, aumenta la autoestima y fortalece los vínculos entre padres e hijos. En este libro práctico, ilustrado con fotografías en blanco y negro y deliciosos dibujos para identificar las diversas señales, los autores ofrecen a los padres un programa simple, divertido y desarrollado paso a paso para que puedan enseñar a sus hijos un medio de comunicación temprana para promover la mutua comprensión.
Investigaciones recientes muestran que las experiencias de los primeros años de vida de un bebé influyen profundamente en la inteligencia y la creatividad. Este libro es una guía para desarrollar las habilidades que su hijo ya tiene a través de juegos divertidos.